lunes, 10 de junio de 2013

LA RESPUESTA A TODO

El amargado se toma la libertad de reproducir en su totalidad esta columna de Javier Hernández. Pueden leerla en este link: http://www.cuadernostm.com/blog/la-respuesta-a-todo/

LA RESPUESTA A TODO

Por Javier Hernández

La respuesta a todo la ha dado José Antonio Choperita, a sus ochentaytantos, con sus achaques, con la clarividencia de quien ha gobernado el toreo y de quien siente que sus propios todavía no son dignos de relevo. A las doce de la madrugada fue. Y todavía no ha dimitido de su cargo de capitán de la Taurodelta que rige Madrid, de la empresa que regenta la plaza más importante del mundo, el buque insignia, el bastión de resistencia, la muralla donde se defiende el Patrimonio de la Tauromaquia.
“A esto le queda poquito tiempo”, dijo José Antonio. Y tras decir eso la vida no puede continuar como si nada. Porque, si el Patrimonio Cultural de la Tauromaquia hablara tendría una respuesta clara: “si me queréis, irse”. A lo Lola Flores. Si “a esto le queda poquito tiempo” ustedes no pueden seguir donde están, porque ya han arrojado la toalla y esa frase tan apocalíptica es la respuesta a todo que hacen. Como al toreo le queda poquito tiempo, vamos a rebañar lo que resta, a saquear los baúles, a aprovechar los últimos días y a no dejar nada sin recoger.
“A esto le queda poquito tiempo”. No es la frase de un anti, ni de un verde, ni de un político progre que mueve su ficha según interese. Esa sentencia es de Choperita y se la ha dicho a un periodista de su quinta que no tuvo arrestos para la pregunta clave: “y, entonces, ¿usted que hace aquí?”.
Usted, don José Antonio, que acaba de facturar unos 16 millones de euros según sus propias cuentas (recuerde que desde su empresa se dijo que se habían perdido casi dos millones de euros por dos mil abonos) ha confirmado que no cree en el futuro, que los taurinos tienen el 90 por ciento de las culpas de esta situación. Y esta mañana de lunes, en la que muchos de los toreros de su San Isidro todavía no han liquidado por considerar indigno el salario ofrecido, usted volverá al despacho de Las Ventas. Y el aficionado se preguntará que para qué. Si “a esto le queda poquito tiempo” es mejor que usted se quite del medio y deje actuar a los que todavía tienen fe en recuperar el esplendor de la tauromaquia.
Porque, don José Antonio, haberlos, haylos. Todavía hay quien invierte en el toreo, en generar toreros, parte de sus ganancias logradas frente al toro. Ahí están los toreros. Todavía hay aficionados activistas que se parten el pecho por ofrecer charlas, por organizar sesiones de toreo de salón, por conseguir dinero e ir a los toros pagando su entrada para disfrutar y para invertir en futuro, no para que se lo quede usted y sus socios del oligopolio porque usted, don José Antonio, ya confirma que “a esto le queda poquito tiempo”.
Una persona que sabe que a su coche “le queda poquito tiempo” de uso ya no lo lleva al taller para renovar amortiguadores. Simplemente, lo usa esperando el día del crack definitivo, y se aprovecha de su coche. Y es lícito que lo haga. Ahora bien, el toreo no es su coche sino un Patrimonio Cultural de todos los aficionados y no está bien que usted, que acaba de usar ese coche para facturar 16 millones de euros, deje esto en el desguace.
La frase de José Antonio Martínez Uranga es la respuesta a todo. Si “a esto le queda poquito tiempo”, vamos a prescindir de los que más cobran (José Tomás, Juli, Juan Mora, Cuvillo, El Pilar y Garcigrande, por ejemplo) en la feria más importante del mundo. Si “a esto le queda poquito tiempo”, vamos a apoderar a todo aquel producto que podamos mover por las ferias y así ganamos también la comisión de apoderados y abaratamos costes entre nosotros. Si “a esto le queda poquito tiempo”, vamos a comprar el ganado a los sumisos porque venderán barato y no pondrán pegas. Si “a esto le queda poquito tiempo”, vamos a olvidarnos del convenio de mínimos y así podremos jugar en un mercado libre donde el torero de oro o plata actuará casi por afición y lo poco que entre en taquilla nos lo quedamos. Si “a esto le queda poquito tiempo”, vamos a recoger que no es hora de sembrar.
Lo ha dicho José Antonio Martínez Uranga. La frase que Toño Matilla lleva dos años pregonando por bares y callejones la ha dicho el empresario de Las Ventas, y no Leo Anselmi, en La SER. Es la respuesta a todo: “a esto le queda poquito tiempo”.
Y el toreo, que no tiene voz pero sí alma, dicta sentencia: “si me queréis, irse”.
NOTA DEL REVENTADOR: Excelente, no hay que añadir nada más. Taurodelta gestiona la plaza en un modelo nocivo que garantiza que sus intereses generen ganancias, así con esta farsa se carguen TODA la fiesta: modelo maligno de "figura-monoencaste, rodeados de una feria miserable para generar el contraste", como contamos en nuestro anterior artículo.